print $title?>
"Querida Subsana", por Andrés Vázquez de Sola
El Maestro plantea devolver la mitad de su Medalla de Oro de Andalucía...
28.01.2015
cartas de Vázquez de Sola, Vázquez de Sola, Susana Díaz, Andalucía, Medalla de Oro de Andalucía, PSOE, IU
Compartir
En la foto de arriba, una paradoja: en el centro, Susana Díaz, y en la extrema derecha, Vázquez de Sola.
Querida Susana: Andalucía se te ha quedado pequeña. Aquí, en la tierra de María Santísima, ya has intentado lo más importante de tus prioridades: lavar la ropa sucia en casa, o mejor, no lavarla por no ensuciar el agua. Estás consiguiendo no remover las heces de la corrupción doméstica. Luchas, ERE que ERE, para que los Pujol, los Matas, los Rato o los Blesa andaluces queden en el anonimato, no sea que te salpiquen. Tu encanto y dotes de persuasión están trabajando para que Anita Botín subvencione tus ambiciones suprarregionales. También para que el Soberano Absoluto de Marruecos –hermano del hijo de Juan Carlos- apoye tu política exterior, y Rajoy pueda elevarte al rango de partenaire de su bipartidismo. Todo un triunfo.
También cuenta en tu favor haberte desecho de los rojos extremistas que te incordiaban. Porque Diego Valderas, todo lo Vicepresidente del Gobierno que era, pretendía visitar a los posibles futuros terroristas saharauís, enemigos del rey Mohamed -sexto como su hermano-, descontentos porque no quieren ver su pueblo ocupado por el ejército marroquí. Eso se llama meter palos en las ruedas de tu carro triunfal.
Otra, Elena Cortés, Consejera de Fomento, tuvo la osadía de impedir, con estúpidas razones constitucionales, que la justicia pusiera de patitas en la calle a quienes, por causa de paro, no pueden pagar a los buitres banqueros. Demagogia pura que dificultaba tu buena andadura con los Botines. ¡¡Fuera!!
Como no hay dos sin tres, mencionemos también a Rafael Rodríguez El Pali, quién, con nombre de torero y cargo de Consejero de Turismo, no era partidario de que los políticos andaluces viajaran como turistas a Suiza, cargados de maletines. A paseo.
Mal compañero de viaje era también este Consejero de Turismo…
A propósito, Susana, cuando te llevabas bien con esa gente, me distinguiste con la Medalla de Oro de Andalucía. Como puedes comprender, yo sigo siendo tan rojo y extremista como lo son estos a quienes has dado la patada de Charlot, mi pregunta es esta: ¿Puedo guardar la medalla entera, o debo devolverte la mitad?
¿Quieres leer más columnas de Vázquez de Sola?
Querida Susana: Andalucía se te ha quedado pequeña. Aquí, en la tierra de María Santísima, ya has intentado lo más importante de tus prioridades: lavar la ropa sucia en casa, o mejor, no lavarla por no ensuciar el agua. Estás consiguiendo no remover las heces de la corrupción doméstica. Luchas, ERE que ERE, para que los Pujol, los Matas, los Rato o los Blesa andaluces queden en el anonimato, no sea que te salpiquen. Tu encanto y dotes de persuasión están trabajando para que Anita Botín subvencione tus ambiciones suprarregionales. También para que el Soberano Absoluto de Marruecos –hermano del hijo de Juan Carlos- apoye tu política exterior, y Rajoy pueda elevarte al rango de partenaire de su bipartidismo. Todo un triunfo.
También cuenta en tu favor haberte desecho de los rojos extremistas que te incordiaban. Porque Diego Valderas, todo lo Vicepresidente del Gobierno que era, pretendía visitar a los posibles futuros terroristas saharauís, enemigos del rey Mohamed -sexto como su hermano-, descontentos porque no quieren ver su pueblo ocupado por el ejército marroquí. Eso se llama meter palos en las ruedas de tu carro triunfal.
Otra, Elena Cortés, Consejera de Fomento, tuvo la osadía de impedir, con estúpidas razones constitucionales, que la justicia pusiera de patitas en la calle a quienes, por causa de paro, no pueden pagar a los buitres banqueros. Demagogia pura que dificultaba tu buena andadura con los Botines. ¡¡Fuera!!
Como no hay dos sin tres, mencionemos también a Rafael Rodríguez El Pali, quién, con nombre de torero y cargo de Consejero de Turismo, no era partidario de que los políticos andaluces viajaran como turistas a Suiza, cargados de maletines. A paseo.
Mal compañero de viaje era también este Consejero de Turismo…
A propósito, Susana, cuando te llevabas bien con esa gente, me distinguiste con la Medalla de Oro de Andalucía. Como puedes comprender, yo sigo siendo tan rojo y extremista como lo son estos a quienes has dado la patada de Charlot, mi pregunta es esta: ¿Puedo guardar la medalla entera, o debo devolverte la mitad?
VÁZQUEZ DE SOLA
¿Quieres leer más columnas de Vázquez de Sola?