La Sección Decimoctava de la Audiencia Provincial de Madrid ha confirmado la sentencia condenatoria contra la revista satírica Mongolia dictada en marzo de 2018 por el juzgado número 3 de Alcobendas y ratifica la condena a indemnizar con 40.000 euros al extorero José Ortega Cano por vulneración del derecho al honor en un cartel satírico.

En el auto de la Audiencia Provincial, fechado el pasado 17 de enero, los magistrados consideran que el fotomontaje satírico, elaborado con motivo de la representación de Mongolia El Musical 2.0 en Cartagena, “es una verdadera ofensa gráfica producida a partir de la imagen real del rostro del Sr Ortega Cano y las expresiones que forman parte del cartel un juicio crítico respecto de dicha persona que deben ser calificadas de desafortunadas”.

Con todos los respetos a sus señorías y a sus conocimientos sobre el humor, Mongolia tiene otra opinión: se trata, simplemente de sátira y, por tanto, no tenemos más remedio que recurrir la sentencia ante el Tribunal Supremo.

Mongolia nació en 2012 como una apuesta periodística para ayudar a ensanchar los márgenes de la libertad de expresión en España, con el convencimiento de que la sátira es uno de los mejores indicadores para medir la calidad de una democracia. Lamentablemente, desde entonces estos márgenes no sólo no se han ensanchado, sino que en realidad se han reducido sensiblemente. Precisamente por ello, Mongolia considera una obligación recurrir esta sentencia al Alto Tribunal, ante el que va a presentar un recurso de casación.

La presentación del recurso implica nuevos gastos excepcionales para la editora de Mongolia, amenazada por la condena misma de 40.000 euros, que deberá afrontar si se convierte en firme, además de los nuevos costes derivados del recurso y eventualmente de las costas del procedimiento. Es por ello que Mongolia lanza una campaña de micromecenazgo con el objetivo de conseguir al menos 10.000 euros para poder recurrir al Tribunal Supremo con garantías y reforzar el proyecto de periodismo satírico de la publicación.

Estos gastos permitirán cubrir:

-Elaboración del recurso de casación por abogados de máxima solvencia que colaborarán con Mongolia por un precio especial.

-Procurador.

-Eventuales costas añadidas si el recurso se pierde.

Este país se está poniendo cada día más complicado. ¿Te imaginas cómo sería si triunfa la estocada del torero?

Ayúdanos a defendernos en el Tribunal Supremo.