Feliz 2016 desde Mongolia
Como todos los años, agradecemos a nuestros lectores su apoyo, que mantiene a Mongolia más viva que nunca
Ahora que termina "el año Mariano" es un buen momento para agradecer a todos nuestros lectores el inmenso apoyo que hemos recibido en estos últimos doce meses; sin ustedes nada sería posible como tampoco lo sería sin esa brillante clase política que nos ha tocado y que tanto juego dan a la hora de hacer una revista como Mongolia.
El panorama político surgido de las recientes elecciones generales permite augurar un nuevo año pleno de posibilidades satíricas para quienes producen Mongolia porque nadie puede negar que la realidad siempre supera nuestra imaginación; la vieja y la nueva política no son más que grandes oportunidades y esperamos estar a la altura de tanta sinrazón.
No podemos menos que reconocer que en estos últimos doce meses nos han surgido fuertes competidores entre algunos medios que se autodenomina serios, como si nosotros no lo fuésemos o como si ellos sí lo fuesen; sea como sea, nuestra calidad y respeto por la inteligencia hace que estemos muy tranquilos ante dichos intentos por emularnos.
A pesar de lo que digan desde algunas cofradías o desde los púlpitos del "liberalismo criollo", seguiremos riéndonos y contando todo aquello que consideremos digno de satirizar o denunciar; ni leyes mordazas ni mordazas sin leyes podrán con nosotros porque sólo nos debemos a nuestros lectores.
Salud, república y mucha suerte para 2016 que vienen curvas y hay que estar preparados.
Gonzalo Boye, editor irresponsable de Mongolia, en nombre de toda la Alta Conducción de Mongolia (Darío Adanti, Edu Galán, Fernando Rapa y Pere Rusiñol)
El panorama político surgido de las recientes elecciones generales permite augurar un nuevo año pleno de posibilidades satíricas para quienes producen Mongolia porque nadie puede negar que la realidad siempre supera nuestra imaginación; la vieja y la nueva política no son más que grandes oportunidades y esperamos estar a la altura de tanta sinrazón.
No podemos menos que reconocer que en estos últimos doce meses nos han surgido fuertes competidores entre algunos medios que se autodenomina serios, como si nosotros no lo fuésemos o como si ellos sí lo fuesen; sea como sea, nuestra calidad y respeto por la inteligencia hace que estemos muy tranquilos ante dichos intentos por emularnos.
A pesar de lo que digan desde algunas cofradías o desde los púlpitos del "liberalismo criollo", seguiremos riéndonos y contando todo aquello que consideremos digno de satirizar o denunciar; ni leyes mordazas ni mordazas sin leyes podrán con nosotros porque sólo nos debemos a nuestros lectores.
Salud, república y mucha suerte para 2016 que vienen curvas y hay que estar preparados.
Gonzalo Boye, editor irresponsable de Mongolia, en nombre de toda la Alta Conducción de Mongolia (Darío Adanti, Edu Galán, Fernando Rapa y Pere Rusiñol)
