‘Mongolia’ recuperó en 2023 el equilibrio contable
La empresa editora de la revista satírica esquiva los números rojos gracias al compromiso de su comunidad.
Editorial Mong, SL, la empresa editora de Mongolia, celebró el pasado 10 de julio en su sede de Premià de Mar (Barcelona) la Junta anual, en la que estuvo representado el 68% del capital social. Los socios aprobaron por unanimidad el informe de gestión y las cuentas del ejercicio de 2023, que recuperaron el equilibrio después de cuatro años consecutivos en números rojos, lo que obligó a la sociedad a entrar en un periodo de economía de guerra del que aún no ha salido completamente.
El resultado formal del ejercicio arroja unas pérdidas de 56.000 euros, pero ello se debe exclusivamente al deterioro contable derivado de la extinción del proyecto Showcase, con el que socios de Mongolia a título particular, en alianza con la revista, buscaban experimentar nuevos formatos para redes sociales. Descontando el efecto meramente contable de esta minusvalía, el resultado real de la actividad corriente de Mongolia en el ejercicio arrojaría unos beneficios de 6.000 euros.
Esta cifra contrasta con los resultados negativos de explotación de los últimos cuatro ejercicios (2019- 2022), que, sin tener en cuenta el impacto contable del Showcase, arrojaron unas pérdidas acumuladas de 112.000 euros. Las nuevas aportaciones de los socios —incluida la incorporación al proyecto de una quincena de suscriptores—, así como las medidas de ahorro implementadas para contener los costes y aumentar la comunidad de apoyo, han permitido mantener a flote el proyecto y recuperar el equilibrio presupuestario sin necesidad de solicitar nuevos créditos bancarios en un periodo especialmente complejo por los efectos de la pandemia y del aumento de la inflación, entre otras dificultades específicas del sector prensa.
La facturación creció el 11% en el ejercicio y los suscriptores, el 10%
Aguante sin deuda
Al cierre de 2023, la deuda bancaria de la empresa se limitaba a 49.000 euros, lo que supone una reducción del 25% con respecto a 2020. La totalidad de la deuda se contrajo con el banco ético Fiare dentro del esquema de créditos ICO impulsados para hacer frente a los estragos económicos provocados por la pandemia del covid19. Los ingresos de Editorial Mong en 2023 aumentaron el 11% con respecto al ejercicio anterior hasta rozar los 239.000 euros. Casi el 80% de los ingresos procedieron de los propios lectores de la publicación a través de las suscripciones, venta en quioscos y librerías, aportaciones en campañas de micromecenazgo y asistencia a los shows en teatros, entre otros. La publicidad supuso el 19,8% del total, mientras que las subvenciones representaron únicamente el 2,5%, a través del programa genérico del Ministerio de Cultura de apoyo a las publicaciones periódicas.
La principal partida de gasto la compone el pago a los trabajadores, colaboradores, así como las cotizaciones a la Seguridad Social, que en conjunto supusieron el 65% del total. La partida para imprenta —entre la revista y los libros editados en el ejercicio— representaron el 12%, mientras que los envíos casi el 7%.
Casi el 80% de los ingresos de la publicación procede de los propios lectores
Compromiso
El compromiso de la comunidad con el proyecto ha sido fundamental para que Mongolia haya podido capear la tormenta perfecta de los últimos años y mantener no solo su periodicidad mensual sino también su presencia en los quioscos, que llegó a estar amenazada ante el aumento constante de costes tras el proceso inflabiéncionario que desencadenó la guerra en Ucrania.
Este compromiso con una causa compartida entre la redacción y la comunidad lectora se ha revelado muy profundo tanto por parte de los trabajadores, que tienen congelada la retribución, como de los colaboradores, que en muchos casos aceptan compensaciones simbólicas por debajo del mercado, y de los lectores y muy singularmente de los suscriptores, que ante la crisis de los quioscos se han convertido en la principal fuente de financiación del proyecto. En 2023, las suscripciones crecieron el 10%, la tasa de renovación se consolidó por vez primera por encima del 70% y hubo los primeros alistamientos a la nueva categoría de Mongol/a de Honor, que se propone reunir a los suscriptores más comprometidos con el proyecto, dispuestos a aportar 100 euros anuales en lugar de los 53 euros de la suscripción completa (papel+digital).
La única deuda bancaria de la empresa es con Fiare Banca Ética
Blindaje accionarial
Una quincena de suscriptores y suscriptoras han ido incluso más allá y han adquirido participaciones de la empresa en los últimos dos años, lo que les convierte en socios a todos los efectos. La composición del accionariado de Editorial Mong, SL, es un asunto de máxima importancia para garantizar la continuidad del proyecto en los términos que lo definen desde su fundación: totalmente independiente de los poderes políticos y económicos y siempre bajo el control de los que elaboran la revista y de su comunidad lectora.
Actualmente, en torno al 70% de las participaciones societarias pertenecen a redactores y colaboradores de la revista, mientras que el 30% restante son de lectores y amigos del proyecto que aceptaron la invitación de la Alta Conducción para sumarse como socios.
Editorial Mong, SL, cuenta con cerca de 60 socios. La Alta Conducción, organismo informal que integra a los editores fundadores, suma el 52% de las participaciones. Ningún otro socio llega al 5%. En el último lustro, todas las decisiones de la Junta General, en la que todos los socios tienen derecho a participar con voz y voto, se han tomado por unanimidad.
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El resultado formal del ejercicio arroja unas pérdidas de 56.000 euros, pero ello se debe exclusivamente al deterioro contable derivado de la extinción del proyecto Showcase, con el que socios de Mongolia a título particular, en alianza con la revista, buscaban experimentar nuevos formatos para redes sociales. Descontando el efecto meramente contable de esta minusvalía, el resultado real de la actividad corriente de Mongolia en el ejercicio arrojaría unos beneficios de 6.000 euros.
Esta cifra contrasta con los resultados negativos de explotación de los últimos cuatro ejercicios (2019- 2022), que, sin tener en cuenta el impacto contable del Showcase, arrojaron unas pérdidas acumuladas de 112.000 euros. Las nuevas aportaciones de los socios —incluida la incorporación al proyecto de una quincena de suscriptores—, así como las medidas de ahorro implementadas para contener los costes y aumentar la comunidad de apoyo, han permitido mantener a flote el proyecto y recuperar el equilibrio presupuestario sin necesidad de solicitar nuevos créditos bancarios en un periodo especialmente complejo por los efectos de la pandemia y del aumento de la inflación, entre otras dificultades específicas del sector prensa.
La facturación creció el 11% en el ejercicio y los suscriptores, el 10%
Aguante sin deuda
Al cierre de 2023, la deuda bancaria de la empresa se limitaba a 49.000 euros, lo que supone una reducción del 25% con respecto a 2020. La totalidad de la deuda se contrajo con el banco ético Fiare dentro del esquema de créditos ICO impulsados para hacer frente a los estragos económicos provocados por la pandemia del covid19. Los ingresos de Editorial Mong en 2023 aumentaron el 11% con respecto al ejercicio anterior hasta rozar los 239.000 euros. Casi el 80% de los ingresos procedieron de los propios lectores de la publicación a través de las suscripciones, venta en quioscos y librerías, aportaciones en campañas de micromecenazgo y asistencia a los shows en teatros, entre otros. La publicidad supuso el 19,8% del total, mientras que las subvenciones representaron únicamente el 2,5%, a través del programa genérico del Ministerio de Cultura de apoyo a las publicaciones periódicas.
La principal partida de gasto la compone el pago a los trabajadores, colaboradores, así como las cotizaciones a la Seguridad Social, que en conjunto supusieron el 65% del total. La partida para imprenta —entre la revista y los libros editados en el ejercicio— representaron el 12%, mientras que los envíos casi el 7%.
Casi el 80% de los ingresos de la publicación procede de los propios lectores
Compromiso
El compromiso de la comunidad con el proyecto ha sido fundamental para que Mongolia haya podido capear la tormenta perfecta de los últimos años y mantener no solo su periodicidad mensual sino también su presencia en los quioscos, que llegó a estar amenazada ante el aumento constante de costes tras el proceso inflabiéncionario que desencadenó la guerra en Ucrania.
Este compromiso con una causa compartida entre la redacción y la comunidad lectora se ha revelado muy profundo tanto por parte de los trabajadores, que tienen congelada la retribución, como de los colaboradores, que en muchos casos aceptan compensaciones simbólicas por debajo del mercado, y de los lectores y muy singularmente de los suscriptores, que ante la crisis de los quioscos se han convertido en la principal fuente de financiación del proyecto. En 2023, las suscripciones crecieron el 10%, la tasa de renovación se consolidó por vez primera por encima del 70% y hubo los primeros alistamientos a la nueva categoría de Mongol/a de Honor, que se propone reunir a los suscriptores más comprometidos con el proyecto, dispuestos a aportar 100 euros anuales en lugar de los 53 euros de la suscripción completa (papel+digital).
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Actualmente, en torno al 70% de las participaciones societarias pertenecen a redactores y colaboradores de la revista, mientras que el 30% restante son de lectores y amigos del proyecto que aceptaron la invitación de la Alta Conducción para sumarse como socios.
Editorial Mong, SL, cuenta con cerca de 60 socios. La Alta Conducción, organismo informal que integra a los editores fundadores, suma el 52% de las participaciones. Ningún otro socio llega al 5%. En el último lustro, todas las decisiones de la Junta General, en la que todos los socios tienen derecho a participar con voz y voto, se han tomado por unanimidad.
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