print $title?>
El mundo de los vencedores
¿Cómo premió Franco a su camarilla golpista? Regalándoles casas, palacios y fincas (expropiadas), entre otros privilegios.
Por Agencia Zoom
Fotografías de Ignasi Prat
Durante años hemos buscado dónde estaban y cuáles son las residencias de la élite franquista. Y hemos puesto el foco en 12 militares y 5 civiles, la flor y nata del régimen. En 2017, el BNG presentó en la ONU una denuncia contra la familia Franco por los privilegios patrimoniales de los que los allegados del dictador siguen disfrutando. La devolución, en particular del Pazo de Meirás (desde 2020 devuelto al Estado), ha sido una reclamación recurrente, pero, como vemos en el trabajo del fotógrafo Ignasi Prat, dista mucho de ser el único caso. Para realizar este exhaustivo trabajo, el fotógrafo Ignasi Prat partió de las actas de defunción de la camarilla franquista.
Vista general del Pazo de Meirás, casa de Franco en Sada (A Coruña), recientemente reconvertido en patrimonio público gallego después de 82 años a manos de la familia del dictador.
En su trabajo, encontramos los casones y palacetes de todos: desde Franco y su hermano Nicolás hasta miembros de la Junta Técnica, primer embrión del Estado franquista (Francisco Fermoso Blanco, Luis Valdés Cabanillas), de la Junta Militar golpista (Miguel Ponte Manso de Zúñiga, Gonzalo Queipo de Llano), ministros varios de los tiempos más negros (Tomás Domínguez Arévalo, José Luis Arrese Magra, Agustín Muñoz Grandes, Francisco Regalado Rodríguez, Blas Pérez González, Carlos Asensio Cabanillas, Ramón Serrano Suñer y Raimundo Fernández-Cuesta Merelo) y personajes importantes dentro del sistema por diferentes conceptos (Juan Vigón Suero-Díaz o Salvador Moreno Fernández). Los edificios retratados por Prats recuerdan lo que fue el régimen, pero también la vigencia de sus privilegios y de la impunidad: para ellos y sus familias, todo quedó atado y bien atado, como muestra esta serie, que capta lo que muchos han llamado “banalidad del mal” o “política pública del olvido”.
Fachada del bloque donde residió Nicolás Franco —secretario general del jefe del Estado entre 1936 y 1938 y embajador de España en Portugal desde 1938 a 1958. Su arquitectura concilia historicismo de inspiración herreriana con la prosperidad que representaban los rascacielos estadounidenses de la época.
Portal interior del bloque donde residió, de forma oficial, Ramón Serrano Suñer —ministro de Gobernación 1938-40 y de Asuntos Exteriores 1940-42—, en el barrio de Salamanca (Madrid).
Vista del Palacio del Canto del Pico, una de las segundas residencias de Franco, en Torrelodones (Madrid). Su emplazamiento en la cima de la colina le proporciona una perspectiva privilegiada desde donde se pueden ver hasta 37 municipios.
Fachada lateral de la casa de José Luis Arrese —ministro y secretario general de FET y de las JONS en dos etapas y ministro de Vivienda 1957- 60—, en Corella (Navarra). Palacio del siglo XVI que junto a distintos tributos simbólicos de la población se constituyen como un homenaje a la figura de uno de los principales teóricos del régimen en los primeros años.
Vista del cortijo de Gambogaz de Queipo de Llano, situado a la orilla del río Guadalquivir, en Camas (Sevilla).
¡APOYA A MONGOLIA!
Suscríbete a Mongolia y ayuda a consolidar este proyecto de periodismo irreverente e insumiso, a partir de solo 35 euros al año, o dona para la causa la cantidad que quieras. ¡Cualquier aportación es bienvenida!
Fotografías de Ignasi Prat
Durante años hemos buscado dónde estaban y cuáles son las residencias de la élite franquista. Y hemos puesto el foco en 12 militares y 5 civiles, la flor y nata del régimen. En 2017, el BNG presentó en la ONU una denuncia contra la familia Franco por los privilegios patrimoniales de los que los allegados del dictador siguen disfrutando. La devolución, en particular del Pazo de Meirás (desde 2020 devuelto al Estado), ha sido una reclamación recurrente, pero, como vemos en el trabajo del fotógrafo Ignasi Prat, dista mucho de ser el único caso. Para realizar este exhaustivo trabajo, el fotógrafo Ignasi Prat partió de las actas de defunción de la camarilla franquista.
Vista general del Pazo de Meirás, casa de Franco en Sada (A Coruña), recientemente reconvertido en patrimonio público gallego después de 82 años a manos de la familia del dictador.
En su trabajo, encontramos los casones y palacetes de todos: desde Franco y su hermano Nicolás hasta miembros de la Junta Técnica, primer embrión del Estado franquista (Francisco Fermoso Blanco, Luis Valdés Cabanillas), de la Junta Militar golpista (Miguel Ponte Manso de Zúñiga, Gonzalo Queipo de Llano), ministros varios de los tiempos más negros (Tomás Domínguez Arévalo, José Luis Arrese Magra, Agustín Muñoz Grandes, Francisco Regalado Rodríguez, Blas Pérez González, Carlos Asensio Cabanillas, Ramón Serrano Suñer y Raimundo Fernández-Cuesta Merelo) y personajes importantes dentro del sistema por diferentes conceptos (Juan Vigón Suero-Díaz o Salvador Moreno Fernández). Los edificios retratados por Prats recuerdan lo que fue el régimen, pero también la vigencia de sus privilegios y de la impunidad: para ellos y sus familias, todo quedó atado y bien atado, como muestra esta serie, que capta lo que muchos han llamado “banalidad del mal” o “política pública del olvido”.
Fachada del bloque donde residió Nicolás Franco —secretario general del jefe del Estado entre 1936 y 1938 y embajador de España en Portugal desde 1938 a 1958. Su arquitectura concilia historicismo de inspiración herreriana con la prosperidad que representaban los rascacielos estadounidenses de la época.
Portal interior del bloque donde residió, de forma oficial, Ramón Serrano Suñer —ministro de Gobernación 1938-40 y de Asuntos Exteriores 1940-42—, en el barrio de Salamanca (Madrid).
Vista del Palacio del Canto del Pico, una de las segundas residencias de Franco, en Torrelodones (Madrid). Su emplazamiento en la cima de la colina le proporciona una perspectiva privilegiada desde donde se pueden ver hasta 37 municipios.
Fachada lateral de la casa de José Luis Arrese —ministro y secretario general de FET y de las JONS en dos etapas y ministro de Vivienda 1957- 60—, en Corella (Navarra). Palacio del siglo XVI que junto a distintos tributos simbólicos de la población se constituyen como un homenaje a la figura de uno de los principales teóricos del régimen en los primeros años.
Vista del cortijo de Gambogaz de Queipo de Llano, situado a la orilla del río Guadalquivir, en Camas (Sevilla).
¡APOYA A MONGOLIA!
Suscríbete a Mongolia y ayuda a consolidar este proyecto de periodismo irreverente e insumiso, a partir de solo 35 euros al año, o dona para la causa la cantidad que quieras. ¡Cualquier aportación es bienvenida!