50 años del último mes de agonía no solo para el caudillo, sino para los españoles y españolas de bien que tuvieron que soportar una larga espera de casi cuatro décadas desde que el más psicópata de los enanitos de Blancanieves se alzó en armas y empezó a dar por culo. Y aunque siguen apareciendo hordas de nostálgicos, ultracatólicos y el fascismo se calza nuevas caretas a través del discurso de los cripto-bro, INCELS, Alt Rights, new-ages, negacionistas y demás fauna, la resistencia satírica continuará plantando cara al facherío rancio todo el tiempo que haga falta.